Identificando las señales de estrés
¿Tu perro destruye muebles, ladra sin parar o se orina en casa cada vez que sales? No lo hace por venganza ni rencor; es muy probable que sufra de ansiedad por separación. Este es un estado de pánico que experimenta el animal al verse alejado de sus figuras de apego. Es importante entender que el perro está sufriendo y necesita ayuda, no castigo.
Rutinas de salida y llegada
Para ayudar a gestionar este estrés, debemos "desactivar" la emoción de nuestras salidas y llegadas. Evita despedidas largas y dramáticas o saludos eufóricos al volver. Intenta ignorar a tu perro unos minutos antes de salir y al entrar, hasta que esté calmado. Esto le enseña que tu ausencia es un evento normal y no algo traumático.
Herramientas de apoyo y enriquecimiento
Dejar a tu perro con juguetes interactivos rellenos de comida puede transformar el momento de tu salida en algo positivo. El uso de feromonas apaciguadoras (difusores) y música relajante también puede ayudar a crear un ambiente seguro. En casos severos, es fundamental consultar con un etólogo o veterinario para evaluar si se requiere medicación temporal junto con terapia conductual.
